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En relación a la dieta hay que establecer dos periodos:

Antes de la cirugía la dieta juega un papel importante para evitar que se produzca el dolor cólico
y las complicaciones como la pancreatitis y la colecistitis. Esa dieta consiste en comer muchas
veces al día (al menos 6) con comidas pequeñas en cada uno de los tiempos y evitar las frituras,
las grasas (eliminando toda la grasa visible de carnes y otros alimentos) y comer poca cantidad de
alimentos derivados de la carne (no más de 400 gramos por semana).

Los huevos por sí mismos no afectan mucho aunque hay que evitar los que se preparan fritos o
con mucha grasa.

Frecuentemente las personas con colelitiasis son obesas o con sobrepeso por lo que la dieta debe
además promover la pérdida de peso para mejorar las condiciones en que el paciente va a llegar
a la sala de operaciones y facilitar su recuperación.

En el periodo postoperatorio es mandatario cortar con la grasa en la forma más completa posible
incluyendo la leche con grasa y obviamente las frituras, mantequillas, natilla, margarina,
mayonesa, mantequilla de maní, salsas o aderezos grasosos, etc. Esto debe mantenerse al menos
tres meses después de la operación. Si se pueden consumir los cereales complejos como el pan o
el arroz integral, las pastas (preferiblemente integrales) y los vegetales incluyendo los frijoles y
la soya. Eso sí en el caso de los frijoles deben molerse o cocinarse muy bien y masticarse
cuidadosamente porque las cáscaras de los mismos tienen azúcares complejos no solubles que se
fermentan en el intestino y pueden producir indigestión o flatulencia.

Nunca se arrepentirá de llevar una dieta cuidadosa después de una operación de la vesícula y le
garantizará una recuperación adecuada y libre de problemas.

Es necesario, en estos casos llevar a cabo un plan de alimentación que responda a las siguientes
características:

Debido que las grasas son los principales estimulantes de las contracciones de la vesícula, lo cual
provoca un gran dolor, deben ser reducidas en la dieta junto con las calorías, en caso que se
tenga sobrepeso.

Si bien los efectos estimulantes de la alimentación son atribuibles a intolerancias individuales y a


la presencia de distintos desordenes gastrointestinales, se recomienda suspender la ingesta de
determinados alimentos, como ser los aliáceos y frutas ricas en ácidos orgánicos como el melón,
la sandia, frutillas.

Deberá suspenderse también la ingesta de mate cebado y todo tipo de alimentos ricos en
grasas.

Los lácteos deberán ser desnatados, como también los quesos que se consuman. Las carnes
deben seleccionarse entre aquellas que sean magras (prefiriendo las aves, pescados).
Entre los vegetales, suelen ser bien tolerados el zapallo, zapallito, zanahoria, tomate y
berenjenas sin semillas, así como las hortalizas de hoja, bien cocidas. No se deberán consumir
cebolla, ajo, palta, pimiento, rabanito, repollo, coliflor, brócoli.

Todas las frutas están permitidas a excepción del melón, sandía, frutilla e higo. Se debe
considerar la tolerancia individual a los cítricos, uvas y manzana cruda, al momento de elegir
entre las frutas.

Los aceites deberán consumirse sin haber sido sometidos a temperaturas altas.

Las formas de preparación de alimentos que deben evitarse, son las frituras, salteados,
gratinados y cualquier otra preparación que contenga grasa modificada por calor.

Los cálculos en la vesícula son más comunes en mujeres que en


hombres. Se sabe que los anticonceptivos orales pueden contribuir a su
formación y que las personas obesas o quienes consumen una
alimentación rica en grasa tienen mayor propensión a desarrollar
cálculos biliares.

Si le han detectado cálculos en la vesícula, siga esta dieta que consiste


en incorporar y eliminar ciertos alimentos. Se trata de una dieta
equilibrada que incluso pueden incorporar a su estilo de vida las
personas que gozan de buena salud.

Alimentos permitidos

• Pescado, pollo o carne magra a la plancha, al horno o a la parrilla.


• Puré de patatas, calabazas, zanahoria o verduras hervidas.
• Puré de manzanas.
• Guisados sin grasa y sólo unas gotas de aceite para que no se
adhieran.
• Papas, calabaza y zanahorias al horno.
• Sopas de verduras.
• Sopas de carne o pollo desgrasado con verduras y fideos.
• Jamón magro.
• Pastas.
• Arroz cocido, con moderación ya que puede causar sequedad de
vientre.
• Tortillas de verduras o patatas con poco huevo cocinadas en el horno.
• Ensaladas.
• Manzanas asadas o en compota.
• Frutas crudas.
• Licuados de fruta.
• Gelatinas.
• Merengue.
• Mermelada.
• Lácteos descremados, leche, yogur y queso magro.

Alimentos prohibidos

Las grasas en todas sus formas.


• Frituras y sofritos.
• Embutidos de cualquier tipo.
• Mayonesa, excepto la 0 colesterol.
• Guisantes, porotos, garbanzos, habas.
• Coliflor, repollo.
• Tomate
• Boniatos o camotes.
• Lácteos enteros como manteca, crema de leche, quesos.
• Productos de pastelería y bizcochería.
• Chocolate.
• Helados.
• Café.
• Jugo de naranja.
• Bebidas alcohólicas.

Importante:
Beber de 2 a 3 litros de agua, esto impedirá la formación de residuos en
los riñones y la vesícula.
Fuente:saludplena.com

Leer mas: Dieta para cálculos en la


vesícula http://www.dietas.com/articulos/dieta-para-calculos-en-la-
vesicula.asp#ixzz1KJV3Rfvv

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