Cabría pensar la sociedad es expresión fiel de la naturaleza humana, pero la
sociedad puede llegar a ser una gigantesca prensa que implacablemente configure o desfigure, a sus propios creadores. En nuestro tiempo, el giro el giro que va tomando el desarrollo social, con su maraña de condicionamientos de todo orden, amenazan con hacer del hombre como escribía Ortega de El hombre y la gente, “un autómata de su sociedad”. Aparece un nuevo protagonista, en la estructura social, que amenaza con desplazar al hombre de escena. Está circunstancia social que hoy nos envuelve al igual que en épocas anteriores, la sociedad ha sido la que ha implantado en la conciencia de sus miembros los valores, ideas, el lenguaje y la cultura con que se amasa lo que los antropólogos han llamado la personalidad básica del individuo. Lo que sucede es que esos condicionamientos se conocen hoy mejor que nunca y, por eso, dan la impresión de ser mayores. También es probable que los resortes del Estado y las instituciones actuales para regular la conducta humana sean superiores a los de otras épocas. También es cierto que la sociedad a la vez que inyecta alas nuevas generaciones de una cultura determinada, las dota del instrumento racional para criticar lo viejo y anticipar a su propia menara un futuro más perfecto. En el texto se trata de alertar contra algunos de los condicionamientos degradantes que sobre él puede ejercer ciertos aspectos de la sociedad, como son la falta de cultura. La falta de cultura recluye al ser humano en un nivel de pensamiento concreto que se caracteriza por: Dificultad para distinguir entre medios y fines, dificultad de adoptar puntos de vista hipotéticos, necesidad de clasificar loa acontecimientos en categorías simplistas, la toma de datos es escasa y breve, ausencia de indagaciones etiológicas, juicios morales tajantes, escasa distinción de las fronteras psicológicas entre el yo personal y las actitudes y la conciencia del grupo y escasa conciencia de su autodisponibilidad, como agente libre de su propia vida. Estudios llevados acabo han coincidido en detectar la existencia de un síndrome o conjunto de rasgos de comportamiento que se conoce usualmente con el nombre de personalidad autoritaria. En realidad, este tipo de personas, predomina en los estratos menos prósperos de la sociedad y en los menos cultos. Experiencias llevadas a cabo han comprobado que la superstición, el racismo y el autoritarismo guardan una relación positiva entre sí, constituyendo una especie de síndrome psicológico, y una relación negativa con la inteligencia y el grado de cultura. No hay que pensar por ello que no existan autoritarismos cultos e inteligentes; pero posiblemente en menor proporción que entre las personas incultas y poco inteligentes. Pero a pesar de todo, parece que la cultura, tal cual hoy se imparte, no basta para inmunizar al hombre contra hábitos sociales profundamente arraigados en la tradición y también en su propia naturaleza. Estos resultados confirman la teoría apuntada de que la incultura predispone a la captación indiscriminada de la autoridad. El propósito del texto que es mostrar como los factores sociales, como la pertenencia a una clase, condicionan profundamente las actitudes y los hábitos de la mente. SOLOMON ASCH “ La inducción de la opinión”
Problema fundamental: el papel de las condiciones sociales en la formación y
modificación de la opinión. Éste comenzó a llamar la atención en el seno de las sociedades de masas industrializadas. Los investigadores partieron de la observación de que las creencias y acciones de la gente pueden ser manipuladas, centrándose en la sugestión. La doctrina de la sugestión: “El hombre es un ser sonámbulo” (frase del cuestionario de clase) con estas palabras resume Tarde una doctrina psicológica de la interacción social, en la segunda mitad S. XIX. Este punto de vista concluye que los hombres en sociedad son semejantes a sonámbulos reviste interés histórico. El punto de partida del estudio moderno de la sugestión lo constituyeron las observaciones del trance hipnótico en los enfermos mentales. 1. se consideró el trance hipnótico, Charcot estudió en la segunda mitad del S.XIX como fenómeno patológico que ocurría en pacientes histéricos. Después Liebault y Berheim afirmaban que la condición hipnótica es un fenómeno normal que puede ser inducido en la mayoría de la gente. Adelantaron que la hipnosis constituye una forma extrema de un proceso psicológico general y normal, que se manifiesta continuamente en el estado de vigilia. Se convirtió en preocupación de los psicólogos el estudiar cómo se puede hacer que las personas normales se sometan a órdenes y crean en aseveraciones formuladas firmemente. El interés de la sugestionabilidad parecía justificado por: 1. se trataba de un efecto social, inducido en una persona por otra. 2. parecía ser no sólo un fenómeno normal, la forma fundamental de la interacción entre persona y persona. 3. la propiedad que los hace únicos a los fenómenos de sugestión es la capacidad de producir cambios en los individuos en ausencia de condiciones objetivas apropiadas.
De acuerdo con la definición de McDougall, la sugestión era la aceptación de una
proposición “con prescidencia de fundamentos lógicamente adecuados”, caracterización que permanece hasta el presente. La sugestión era una forma de control social de la acción y la experiencia. Tarde y Le Bon tomaron en sus escritos la noción, todavía mal definida, y la adaptaron a la explicación de acontecimientos de grupo más amplios. Tarde hablaba de imitación, que no era distinguible de la sugestión, como de un proceso clave; Le Bonj describía el comportamiento de las multitudes en términos de la sugestión que los grupos ejercían sobre los que se hallaban dentro de él. Ross introdujo y aplicó la noción de sugestión a los procesos sociales. la psicología social reclamaba de los sociólogos la idea de sugestión. En la psicología se describe la acción social en términos de pasividad, y que equipara la influencia del grupo a un control arbitrario. Los fenómenos que se mencionaban como centrales en la acción social fueron caracterizados como irreflexivos e irracionales. El propósito que sostenía la sugestión era describir la conducta social como “irracional. El papel atribuido al pensamiento fue el de un proceso inhibitorio que servía de freno a las fuerzas de la sugestión,que eran más primitivas y permanentes. Algunos autores llamaron credulidad primitiva existía en la mente humana una tendencia fundamental a creer inmediatamente cualquier idea que se le presente. Fue esta apreciación de los procesos sociales la que se traspuso y aplicó a toda la zona de los acontecimientos sociales. En este periodo más reciente se convirtió en la base para explicar la formación de actitudes. Una sugestión es simplemente una impresión externa que jerce un efecto automático sobre la base de la experiencia previa. Benheim declaraba “ toda impresión, toda imagen mental, todo fenómeno consciente configura una sugestión, “estaba enunciando el principio asociacionista de que cada elemento de la conciencia aparece solamente en virtud de su asociación con otro. Pavlov: “podemos considerar la sugestión como la forma más sencilla del reflejo condicionado típico del hombre. Las primeras descripciones de la sugestión debido al postulado asociacionista estaban desprovistas de una referencia a las condiciones motivacionales.
CARLOS CASTILLO DEL PINO: Teoría de los sentimientos
Cualquier acto esta en función de la actitud y del contexto. La actitud es de índole
afectivo emocional y constituye el factor diferenciador, y motor, de conductas o comportamientos que son formalmente idénticos. Gracias a la versatilidad de las actitudes, cobra relieve una propiedad fundamental del sujeto: su intrínseca inestabilidad, el proceso constante de construcción /destrucción que tiene lugar para su adaptación en cada contexto.
Etapas en la organización axiológica:
El ser humano pasa por diferentes etapas en la evolución de la organización subjetiva de
la realidad.
1ª etapa.- Bipolarización: se caracteriza por el deseo del objeto y la disyuntiva entre
poseerlo y no poseerlo. (Lewin: valencia= el valor de los objetos del entorno del niño dicho por el profe)
2ª etapa.- Bipolaridad de los sentimientos básicos. Los objetos poseídos producen
placer o displacer en función si son objetos míos, o no míos. La miocidad es todo lo que se ha logrado hacer de uno, y la alteridad lo no mío pero perteneciente a mi propio mundo.
3ª etapa.- La ambivalencia y la fragmentación del objeto. El término ambivalencia
introducido por Freud. En esta etapa aparece el objeto de fragmentado. La importancia de la ambivalencia se deduce del hecho de que los sistemas cognitivoafectivos del sujeto se han desarrollado ya lo suficientemente como para establecer cada vez relaciones más complejas con los objetos. A la relación disyuntivoexclusiva ( el objeto, bueno o malo) sucede la disyunción no excluyente(el objeto, bueno y malo, o malo y bueno).La cuantificación de los sentimientos provocados
4ª etapa.- La cuantificación de los sentimientos provocados con la aparición de los
cuantificadores en el lenguaje, el niño cuantifica su deseo de posesión, aunque el deseo de destrucción se debate entre el todo y el nada. 5ª etapa.- La especificación desiderativa. Los objetos se diferencian según el tipoi de provocación desiderativa que suscitan, el niño especifica las áreas de su identidad para convertirse, en objeto de transacción con los demás, y en objeto de autoestima o autodesestima. Objeto poliédrico lo llamo el profe.