No. 155
Materia: Optativa
Grupo: 6 IM
“El amigo fiel es una defensa poderosa; quien lo halla, ha hallado un tesoro.”
» Eclesiástico
“El niño con el pijama de rayas” obra del autor John Boyne, relata una historia muy
conmovedora pues la acción se narra a partir de la óptica de Bruno, hijo de un
oficial de Schutzstaffel, el cual fue ascendido a comandante, razón por la cual tuvo
que mudarse de casa junto con su familia, a un lugar llamado “Auchviz” Auschwits.
Este hecho no lo hacia feliz pues al ser un niño tendría que dejar su escuela, su
hogar y sobretodo a sus tres mejores amigos. Lo único que lo hacía feliz al dejar
Bering (Alemania), era que ya no iba a ver a las amigas de su hermana Gretel, ya
que lo molestaban las veces que ellas querían. Su hermana era mayor que él por
tres años y por ello no tenían una buena relación.
Bruno tenía 9 años de edad, y aún no comprendía los horrores del entorno en el
que vivía. Al mudarse a la casa nueva, ni a él ni a su hermana les acogió su nuevo
hogar, pues no había más niños con quien jugar y estaba en medio de la nada, les
parecía triste y aburrida. Sólo estaban los empleados de la casa y muchos
soldados que entraban y salían porque trabajaban para su padre. Un día tras
mucho aburrimiento Bruno decide aventurarse e irse por el patio trasero, ya que a
lo lejos había observado personas con pijamas, a través de la ventada de su
cuarto. Sus dudas eran varias, primero ¿por qué usaban “pijamas rayadas”? ¿por
qué los dividía una inmensa alambrada? y ¿por qué había muchas cabañas, y en
medio de estas salía humo? El tenía prohibido mendigar por ahí, pero como le
gustaba jugar a los exploradores tomó la decisión de salir. Caminó demasiado
hasta que su casa desapareció completamente, pensó que era un mal explorador
porque no había encontrado nada, hasta que de repente vio un punto que
conforme avanzaba se convirtió en un niño.
Bruno tiene una amistad con ese niño llamado Shmuel, que vivía al otro lado de la
cerca de su casa, con demás personas. Inician una plática que poco a poco se
convierte en una verdadera amistad. Bruno frecuentemente a visitarlo siempre
llevaba un poco de comida, ya que Shmuel le contaba que la comida de adentro
era verdaderamente espantosa; también llevaba juegos a pesar de que no podían
jugar porque los dividía la cerca, solamente se sentaban a charlar. Eso era
verdaderamente sorprendente para Bruno porque nunca se había reunido con un
niño solamente para platicar, eso lo hacia sentir bien hasta ya no lograba
acordarse de los nombres de sus antiguos amigos que tenia en Bering. Ellos
platicaban de sus padres, se dieron cuenta de que tenían símbolos diferentes. Lo
que los dejó sorprendidos fue saber que tenían la misma edad, habían nacido el
mismo día, mes y año.
Bruno un día le pregunto a su hermana ¿qué era esa alambrada? quería saber
porque estaba ahí. Gretel incrédula no podía creer que no supiera eso, pero ante
la aberración de su hermano le contestó que del otro lado vivía gente JUDIA y lo
repitió una y otra vez. El niño como era verdaderamente inocente le pregunto: –
que si eso era malo, ¿y que ellos, qué eran? le contesto su hermana: –que eran lo
contrario, y somos nosotros los que no nos gustan ellos. Aunque lo que le había
dicho no lo hizo cambiar de opinión, siguió frecuentando a Shmuel pero platicaron
acerca de eso. Shmuel no entendía que como una persona tan soberbia podría
tener un hijo tan humilde y sencillo que era Bruno,
La madre de Bruno estaba furiosa por la situación lo que la llevaba a pelear
constantemente con su esposo, diciéndole que esa no era la clase de lugar para
educar a sus hijos, por lo que ocurría del otro lado de la alambrada, por eso se
refugiaba en el alcohol. Hasta que un día, el padre de Bruno y Gretel les dio la
buena noticia de que se iban a regresar a vivir a su antigua casa. A Bruno ya no le
daba mucho gusto porque ya había encontrado un verdadero amigo. Así que un
día antes de regresar a su antigua casa, fue a despedirse de Shmuel, pero iba con
la mentalidad de decirle que ahí si lo iba poder ir a visitar sin ningún problema.
Aunque Shmuel le contó que no encontró a su padre y que duró horas
buscándolo, de modo que Bruno al haber sentido que lo había defraudadazo trató
de compensarlo. Le dijo que le iba ayudar a encontrar a su padre así que se le
ocurrió un plan, como se parecía un poco a su amigo porque lo habían rapado
como a ellos, a diferencia de que no se estaba ojeroso, y escuálido. Le pidió a
Shmuel que le consiguiera una pijama igual a la suya y una gorra como las que
ellos traían para darle mayor seriedad a su papel ya que estaba acostumbrado a
actuar porque así lo hacia con su abuela.
Era su oportunidad de tomar el papel de explorador y se iba cruzar del otro lado de
la cerca para poder ayudarlo. Ese día estaba lloviendo pero el clima cambió
radicalmente, Bruno salió de su casa con botas y comida, se resbaló muchas
veces por el lodo que dejó la lluvia. Cuando llegó su amigo lo estaba esperando,
así que echaron a andar el plan, se desvistió y dejó la ropa que traía justo al lado
de la alambrada, escavaron juntos con una par de palas, y se cruzó por debajo.
Buscaron al papá de su amigo durante horas, Bruno le dijo que lo lamentaba
cuando empezó a llover de nuevo y pitaron los soldados, los formaron a todos los
pusieron a marchar en la plena lluvia, los metieron en un cuarto y dijo Bruno que
ya estaba asustado que se quería ir que de seguro lo estarían buscando. En eso
los hicieron que se desvistieran y los que metieron en un cuarto, ellos se tomaron
de la mano y se apretaron. La familia de Bruno ya estaba preocupada porque no
lo encontraban. Los soldados empezaron a buscar por todos los alrededores,
hasta que encontraron la vestimenta de Bruno, le avisaron al comandante, el fue a
la alambrada y observó el hoyo que había abajo, se imaginó lo peor, entró del otro
lado a buscarlo, cosa que fue demasiado tarde los habían metido en ese cuarto y
habían muerto quemados.
Creo que la inocencia e ingenuidad que existe en un niño es inmensa, es lo mejor
que puede tener, como es fácil de no ver las cosas que suceden, y lo que significa
la verdadera amistad. O por todas las barbaridades que enfrenta la vida en un
pasado, un presente y el futuro, viendo injusticias, discriminaciones, conflictos
entre pobres y ricos, desempleo, problemas familiares y demás. Y una cosa que
no se explicará, que la vida te puede mandar lecciones de manera brutal, y lo
pagas con lo que más te duele.
Me surgió una pregunta: “¿Quién no desearía volver a repetir su niñez llena de
inocencia?” del cual girar en un mundo totalmente desconocido y no saber nada
de tus alrededores, que a la hora de realizar sus actividades de distracción para
no causar su aburrimiento lo lleguen a plantear con ciertas travesuras, de manera
que al pagar se soluciona con una sonrisa.
O como también “¿A quienes no les gustaría vivir una vida digna, sin sufrir ningún
tipo de discriminación racial, o que tengas un problema porque profesas otro tipo
de religión?”. Desgraciadamente estos tipos de conflictos se han planteado desde
tiempos remotos, pero con diversos acontecimientos que han dejado marcado con
cicatrices alternas a la nación. Cito como ejemplo “El niño con el pijama de rayas”
obra del autor John Boyne, que relata una historia demasiado triste, la cual se
origina a través de la ciudad de Berlín (Alemania), acerca de un pequeño que tan
sólo tiene 9 años de edad, que no puede comprender los horrores del entorno en
el cual vive.
Considero que un niño fue creado con una estructura perfecta y tiene su gran
finalidad, transmitir paz, alegría, prosperidad, bondad, y sobretodo para dar y
recibir amor, sin esperar nada a cambio. Aparte unas de las principales cualidades
que los caracterizan son su inocencia e ignorancia. Por todos esos “defectos” que
los catalogan, es difícil que aprecie el lado malo que existe en los alrededores, por
ejemplo; si los adultos les hacen una mal gesto o expresión, o un regaño que se
convirtió en un castigo porque cometió una pequeñita travesura pero que a la hora
después se le olvide lo ocurrido. En cambio no nos ponemos a reflexionar que los
adultos tenemos mayor número de errores o mas bien horrores que un simple
niño, también no logran apreciar la serie de problemas que enfrenta la vida diaria
(muertes, guerras, delincuencia, discriminación racial, pobreza, desintegración
familiar, alguna clase de vicios ya sea alcoholismo, obsesión al tabaco etc.) cosas
que no logran comprender.
Estas razones fueron la ultima gota que derramara el vaso de la paz de Hitler. El
formó su imperio con un logo representativo que tiene tres significados, el más
importante es “paz y suerte”. El principal objetivo para Hitler era acabar con este
tipo clase de personas ya mencionadas que no tenían la culpa de nada, personas
que no le habían hecho ningún tipo de daño, de manera que era un sólo desquite
de rabia por las personas judías por las que sufrió. Aparte no le interesaba si
tenían que morir bebes, niños, adultos, mujeres, ancianos, o si desintegraba una
familia. Hitler era una persona cruel, que acaba con ese tipo de personas de
maneras brutales como: meterlos en campos de concentración, acribillándolos,
quemarlos en las calderas, fusilados o mediante las inyecciones letales.
Ahora podemos apreciar que esos tiempos fueron de inmensa tragedia, que nadie
desearía repetir por ningún motivo. Pero si apreciamos un poquito más, nos
damos cuenta que van tomadas de la mano, por la forma que vivimos hoy en día
en nuestra actualidad, existe severa amplia variedad de discriminaciones:
Para finalizar cabe decir que por estos tipos de casos no llegamos a tener una
vida digna o placentera. Si no viviste esta serie de casos tú, no sabríamos si lo
pueden llegar a presentar tus hijos o los hijos de tus hijos. ¡Uno nunca puede ver o
planear su futuro!
Podemos llegar a concluir, que el mundo sigue con las mismas condiciones de
antes, no al grado tan bajo como en la época del liderazgo de Hitler. Vivimos en
otra época totalmente diferente donde cada quien se puede expresar libremente,
es completamente libre de tomar las decisiones que uno quiera, puede hacer
verdaderamente lo que le plazca, pero parece que es todo lo contrario lo
desaprovechamos, reflexionemos ¿que no hubieran dado esas personas que
sufrieron en tiempos remotos vivir como vivimos hoy en día? Se llega a observar
que entre nosotros mismos nos cerramos las puertas del camino, lo manejamos
todo con ciertas competencias, sobornos, rencores y demás, perdiendo nuestros
valores, en vez de salir juntos tomados de la mano, parece que siempre tenemos
que andar maldiciendo, criticando, humillando, insultando, discriminando a los que
nos rodean. Y si nosotros los adultos tenemos algún tipo de conflictos, somos
verdaderamente orgullosos dejamos pasar si no es semanas, meses, años, y no
nos llegamos a retractarnos o aclarar nuestras indiferencias por las cuales
sucedieron las cosas.
En cambio parece que los niños a veces nos dan clases de moral, aunque nunca
lo reconocemos, ellos son tan inocentes, sin ninguna clase de malicia no logran
causar ningún tipo de daño a sus alrededores. Como tampoco llegar a apreciar las
desgracias que el mundo actual presenta. Ellos saben llevar una competencia
entre ellos mismos limpia sin ningún tipo de rivalidades, y sobrellevar una amistad
mutua sin esperar algo del otro, y si en dado caso uno cae el otro se regresa para
ayudarlo a pararse y aparte para consolarlo para que no llore más.
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