A la Comunidad Universitaria
Consideramos que el documento más que dar respuesta a las demandas de los
estudiantes, es un discurso para quedar bien socialmente. Los problemas de la
educación superior merecen no sólo “unas líneas” con respecto a nuestras “ideas”,
sino una inmediata acción que materialice los proyectos que, como estudiantes
universitarios no partidistas, hemos elaborado con dedicación, reflexión,
responsabilidad y tiempo.
Si bien coincidimos con que los cambios que esperamos son profundos y no todos a
corto plazo, el dejar abierto el “posible” acercamiento a través del diálogo y un trabajo
conjunto, no asegura la concretación de estos espacios ni nuestra real participación
con voz y voto de las decisiones que de estos emanen. Con respecto a la “labor
intensa” realizada con los rectores del CRUCH, cuestionamos los lineamientos que de
ellos emerjan, dado que estas autoridades no son elegidas democráticamente por lo
que no necesariamente representan el sentir de la comunidad universitaria.
Por otro lado, se deja en claro que no hay intención de tratar todos los temas que
hemos planteado, sino sólo aquellos que él considera pertinentes. Rechazamos su
“invitación”, bajo la lógica que es nuestro derecho que se nos integre en la
construcción del sistema educativo que anhelamos; el carácter de invitados limita, a
priori, nuestra participación.
Con respecto a las medidas concretas que enuncia el Ministro en la última parte de su
carta, nuestra opinión es explícita dentro del petitorio de la PUCV. Esperamos que las
mesas de trabajo que él propone conformar no se centren sólo en temas de
financiamiento, sino que integren también, todo aquello relacionado con la
democratización dentro de nuestras instituciones. Sólo seremos participes de estas
instancias de diálogo una vez que exista claridad respecto a la participación que
tendremos en ellas, donde exigimos que nuestros representantes no sólo tengan voz
sino que también voto y que este sea significativo a la hora de tomar decisiones.
Estudiantes en Toma