El problema fundamental del diseñador reside en construir un equipo que
responda lo más enteramente a las necesidades de la economía nacional, que dé el mayor efecto económico y que disponga de los índices más altos técnico- económicos y de explotación. Los índices principales son: alta productividad; rendimiento económica; resistencia mecánica; fiabilidad; peso mínimo; volumen metálico, dimensiones exteriores, capacidad energética; volumen y precio de coste de los trabajos de reparación, gastos en la mano de obra; elevado recurso de longevidad; largos períodos entre reparaciones; elevado recurso moral y grado de automatización; sencillez y seguridad de servicio; comodidad de manejo (mando), de desmontaje y montaje. En la construcción de las máquinas es necesario observar las exigencias de la estética industrial. El aspecto exterior de las máquinas debe ser agradable, al acabado clásico y fino. Naturalmente que el peso específico de cada uno de los factores enumerados depende de la designación de la máquina: en las máquinas-generadores y en los convertidores de energía está, en primer plano, la magnitud del rendimiento que determina la perfección de la transformación de la energía consumida en útil; en las máquinas para elaborar, la productividad, el funcionamiento con precisión y sin fallos, el grado de automatización; en las máquinas herramientas, la productividad, la exactitud de elaboración, la gama de las operaciones a ejecutar; en la construcción de aparatos, la sensibilidad, la exactitud; la estabilidad de las lecturas; en al técnica de transporte, particularmente, en la aviación y en la cohetería, el pequeño peso de la construcción, el alto rendimiento del motor que condiciona el pequeño peso de la reserva de combustible de a bordo. La economía tiene también una gran significación en la construcción de maquinaria. El diseñador, al proyectar la máquina debe conseguir, por todos los medios, aumenta su rentabilidad y elevar el efecto económico para todo el período de funcionamiento. Los procedimientos principales para resolver este problema residen en elevar la eficiencia de la máquina, aumentar su longevidad y reducir los gastos de explotación. Al mismo tiempo, el constructor debe preocuparse por disminuir el volumen de trabajo en la fabricación, rebajar el precio de coste, reducir los plazos del diseñado, de fabricación y de puesta en punto de las máquinas. El coste de la producción de la construcción de maquinaria depende del amplio complejo de factores tecnológicos, de organización del proceso de producción, económicos, de tarifa y otros.
1.2.- FUNDAMENTOS ECONÓMICOS DEL DISEÑADOR
El factor económico debe desempeñar un papel primordial en el diseñado. Los
pormenores de la construcción no deben cubrir el objetivo fundamental del diseñado, esto es, el aumento del efecto económico de la máquina. Muchos constructores consideran que diseñar económicamente significa disminuir el coste de fabricación de la máquina, evitar soluciones complejas y caras, emplear los materiales más baratos y los procedimientos de elaboración más simples. Esto es sólo una pequeña parte del problema. La significación es que el efecto económico se determina por la magnitud de la eficiencia de la máquina y por la suma de los gastos de explotación de todo el período de trabajo de la misma. El coste de máquina es sólo un componente, y no siempre el principal, de esta suma. El diseñado económicamente orientado debe tener en cuenta todo el complejo de factores que determinan el rendimiento económico de la máquina y apreciar, de modo correcto, la significación relativa de estos factores. Esta regla frecuentemente se ignora. Tendiendo al abaratamiento de la producción al constructor con frecuencia consigue economía en una dirección, dejando pasar por alto otras vías mucho más efectivas del aumento del rendimiento económico. Es más, la economía parcial, que se efectúa sin tener en cuenta el conjunto de todos los factores, con frecuencia lleva a la disminución del rendimiento económico sumario de las máquinas. Los factores principales que determinan el rendimiento económico de las máquinas son la magnitud de la eficiencia de la máquina, la longevidad, la fiabilidad, el coste de la mano de obra, el consumo de energía, el coste de las reparaciones y el coste de la fabricación de la máquina.
1.2.1.- EFICIENCIA
La eficiencia se expresa por el coste de la producción o por el trabajo útil que
cumple una máquina en la unidad de tiempo. La magnitud de la eficiencia depende de la productividad de la máquina, es decir, del número de operaciones (o unidades de trabajo) que produce ella en la unidad de tiempo y del precio de las operaciones (de las unidades de trabajo). El aumento de la eficiencia es un problema complejo, cuya solución depende en mucho de la explotación correcta. Para los automóviles, por ejemplo, los medios de explotación para aumentar la eficiencia residen en reducir los recorridos en vacío (sin carga), en aumentar la velocidad técnica de marcha, en aumentar la utilización de la carga (empleo de remolques). Etc. La productividad de las máquinas para elaborar se aumenta con la intensificación de las operaciones tecnológicas, aplicando aditamentos y equipo especial. En lo fundamental, este problema se debe resolver con medias constructivas. A la máquina se debe dar la mayor productividad posible, concordada con las exigencias reales de la producción y con las perspectivas de su desarrollo. Los órganos de trabajo de la máquina conviene calcularlos al máximo volumen de operaciones con la elección correspondiente de su cinemática, capacidad, resistencia y rigidez.
1.2.2.- LONGEVIDAD
La longevidad de una máquina, lo mismo que la eficiencia, depende mucho de las
condiciones y del nivel técnico de la explotación. El cuidado minucioso de la máquina, el entretenimiento calificado, la profiláctica a su debido tiempo y la prevención de sobrecargas puede aumentar la longevidad de la máquina. No obstante, lo que decide la longevidad es la construcción correcta de máquina.
1.2.2.1.- CRITERIOS DE LA LONGEVIDAD
La longevidad de máquina es el tiempo total que ésta puede funcionar a un
régimen nominal en condiciones de explotación normal sin reducción esencial de los fundamentales parámetros previstos, teniendo en cuenta todas las reparaciones siendo su coste sumario económicamente admisible. A veces se emplea el concepto de recurso de longevidad, es decir, el tiempo de trabajo de la máquina en horas hasta la primera reparación general. En muchos casos, particularmente para las máquinas combinadas de acción periódica, la longevidad se mide según los índices del rendimiento sumario durante todo el tiempo de funcionamiento de la máquina combinada. La longevidad determinada de este modo representa el número total de operaciones o de unidades de trabajo que puede realizar la máquina o el equipo hasta su desgaste máximo. Así la longevidad del transporte automóvil y del material móvil ferroviario se determina por el recorrido sumario límite en kilómetros; la de los aparatos y las máquinas de ensayo, por el número total de conexiones; la de los grupos de fusión, por la cantidad total de fusiones que soporta el grupo; la de las máquinas labradoras de suelos, por la cantidad de hectáreas que labran. La longevidad efectiva puede desviarse considerablemente de la nominal según sean las condiciones de trabajo. Esta disminuye al sobrecargar sistemáticamente la máquina, al trabajar en regímenes de velocidad elevada, al elevar los esfuerzos de trabajo, en condiciones climatológicas desfavorables. En condiciones aliviadas de trabajo la longevidad de la máquina aumenta. - Plazo de funcionamiento El plazo de funcionamiento o duración de servicio de una máquina es la duración total de su permanencia en explotación hasta agotar por completo el recurso de longevidad. 1.2.3.- MEDIOS PARA AUMENTAR LA LONGEVIDAD
Los factores principales que limitan la longevidad y fiabilidad de las máquinas
son los siguientes: rotura de las piezas; desgastes de la superficie de razonamiento; deterioro de la superficies debido a la acción de las tensiones por contacto; endurecimiento por deformación en frío y corrosión; deformaciones plásticas de la s piezas condicionadas por las transiciones locales y generales de las tensiones fuera de límite de fluencia o (a elevadas temperaturas) del arrastre. La resistencia mecánica, en la mayoría de los casos, no es un límite indefinible. En las máquinas de aplicación se pueden evitar completamente las roturas. Con el surtido de materiales de construcción de maquinarias disponibles en la actualidad, con los métodos de fabricación existentes, con el estado actual de la ciencia sobre la resistencia mecánica, en está clase de máquinas, no hay piezas que no se les pueda dar prácticamente una longevidad ilimitada. En el caso de las máquinas de clase tensada, como las de transporte, el problema es más complejo. Las exigencias a las dimensiones exteriores y al peso obligan a aumentar las tensiones teóricas, debido a lo cual aumenta la probabilidad de las roturas. Sin embargo, el perfeccionamiento interrumpido que consolida la tecnología y la especificación de los métodos de cálculo permiten también, en el caso dado, liquidar o considerablemente separar los límites de resistencia de la longevidad.
1.3.- FIABILIDAD DE EXPLOTACIÓN
La fiabilidad de la máquina se compone de los siguientes síntomas: alta
longevidad; funcionamiento sin fallos, sin averías, estabilidad de acción (capacidad de trabajo duradero sin bajar los parámetros iniciales), resistencia a la fatiga (capacidad de resistir las sobrecargas), pequeño volumen de operaciones de entretenimiento y mantenimiento, poca exigencia en el entretenimiento, vitalidad (capacidad de continuar trabajando cierto tiempo en el caso de deterioros parciales, aunque sea con parámetros reducidos), capacidad de eliminación de los deterioros (conservación de la capacidad de reparase), largos plazos entre las reparaciones, pequeño volumen de los trabajos de reparación. Debido a la gran diversidad de síntomas que determinan la fiabilidad es dificultoso establecer su criterio único. Lo más frecuente al determinar la fiabilidad es partir del concepto de fallo de la máquina, es decir, cualquier parada forzada de la máquina.
1.3.1.- CAMINOS PARA AUMENTAR LA FIABILIDAD
La fiabilidad de las máquinas, en primer lugar, se determina por la resistencia
mecánica y la rigidez de la construcción. Los procedimientos racionales de elevar la resistencia que no necesitan el aumento del peso son: el empleo de perfiles y formas ventajosas, la utilización máxima de la resistencia del material, carga uniforme, en lo posible, en todos los elementos de la construcción. Los mejores procedimientos de elevación de la rigidez son la elección correcta del esquema de carga, la disposición racional de los apoyos, dar a las construcciones formas rígidas. La ausencia de averías en el trabajo y la duración de los plazos entre las reparaciones dependen en mucho de la correcta explotación, del cuidado minucioso de la máquina, de los entretenimientos escrupulosos, de la profilaxis a su debido tiempo y de evitar las sobrecargas. Pero sería injusto confiar completamente en la calidad del entretenimiento. Las condiciones de la correcta explotación de la máquina deben ser previstas en su construcción. Se debe garantizar el trabajo fiable, incluso en las condiciones de entretenimiento insuficientemente calificado. Si la máquina se estropea en manos inhábiles o inexpertas, esto significa que la construcción se ha elaborado insuficientemente desde el punto de vista de la fiabilidad. El factor subjetivo en el entretenimiento y mando de la máquina conviene eliminarlo en lo posible, y deben reducirse al mínimo las operaciones de entretenimiento. Deben excluirse tales operaciones periódicas como la regulación, el tensado, la lubricación, etc., que como resultado de una calificación insuficiente del entretenimiento puede ser el motivo de un desgaste elevado y de que la máquina puede fuera de servicio prematuramente. 1.4.- PUESTA A PUNTO DE LAS MÁQUINAS EN SERVICIO
Con el fin de crear máquinas fiables y durables es necesario estudiar
minuciosamente la experiencia de la explotación. El trabajo de las oficinas de proyectos sobre la máquina no debe finalizar con los ensayos oficiales de la muestra experimental y con la entrega de la máquina para la producción en serie. La puesta a punto de la máquina comienza verdaderamente después de que se pone en servicio. La comprobación de su funcionamiento permite mejor que nada descubrir y eliminar los puntos débiles de la construcción. Las insuficiencias de la máquina se revelan sobre todo claramente durante su reparación. Por eso, es obligatorio que el diseñador tenga relación estrecha y continua con las empresas de reparación. Es de provecho que las fábricas constructoras de producción en masa y en gran escala tengan sus propios departamentos de reparación, como laboratorios para estudiar las máquinas y escuelas para elevar la calidad del diseñado.
1.5.- PRECIO DE COSTE DE LA MÁQUINA
La reducción del coste de la producción de maquinaria representa un problema
complejo: de producción y de construcción. La racionalización de la producción (mecanización y automatización de los procesos de elaboración, concentración de las operaciones tecnológicas, especialización de las plantas, cooperación fabril, etc.) disminuye bruscamente el coste de la fabricación de las máquinas. Estas medidas son realizables y dan el mayor efecto para grandes envergaduras de la producción y estabilidad de los productos. Aquí, en primer plano sobresale la importancia que tiene el diseñador. Este debe inculcar en la construcción las premisas de la fabricación de un modelo en el recurso de un largo período de tiempo a la mayor envergadura posible de producción, es decir, crear una construcción que posea amplia aplicación y recursos de desarrollo y de perfección. Una gran significación tiene la disminución del número de dimensiones tipo de las máquinas, mediante la elección racional del conjunto de tipos y parámetros de las máquinas. La reducción de la cantidad de modelos permite elevar la producción en serie con ganancia en el precio de la fabricación. Lo importante es garantizar las cualidades de ingeniería que deben reunir las construcciones. Se entiende por cualidades de ingeniería el conjunto de síntomas que garantizan la fabricación más económica, rápida y productiva de las máquinas, aplicando los métodos progresivos de elaboración con el aumento simultáneo de la calidad, exactitud e intercambiabilidad de las piezas. En el concepto de cualidades de ingeniería conviene incluir también los síntomas que aseguran el montaje más productivo del objeto (cualidades de ingeniería del montaje) y la reparación más conveniente y económica (cualidades de ingeniería de la reparación).