Anda di halaman 1dari 3

Textos: María Victoria Ramírez Crespo y Ana Belén Carmona Rubio

ASOCIACIÓN LASEXOLOGIA.COM
TERAPIA SEXUAL Y DE PAREJA. SEXOLOGÍA Y PSICOLOGÍA. CURSOS Y TALLERES DE
EDUCACIÓN SEXUAL. FORMACION EN SEXOLOGIA.
Asociación Lasexologia.com. C/ Jacometrezo, nº 4, planta 8ª, oficina 14. 28013,
Madrid. España. Teléfono: (00 34) 91 523 08 14
E-mail: formacion@lasexologia.net www.lasexologia.com / www.lasexologia.net

LA SEXUALIDAD DE LOS HOMBRES Y EL PENE


En la concepción actual, la erótica es considerada como una parte esencial del ser
humano, sea cual sea su sexo o condición social.

Como comentamos en un artículo anterior, se reconoce al fin, la existencia de la


erótica femenina. Se reconoce la importancia de desarrollar una vida erótica
satisfactoria y plena, tanto en el varón como en la mujer, considerándose los
encuentros eróticos una parte esencial en la convivencia y adecuación de las
parejas.

En los tiempos actuales, por tanto, se considera que tanto el varón como la mujer,
tienen sexualidad. Ahora bien, si la mujer posee erótica no es dueña de ella,
es una faceta que tiene pero que ha de despertarle su pareja.

El papel del hombre cambia por tanto sustancialmente: se sigue valorando


su supuesta “potencia”, pero ahora lo importante no es la cantidad, sino la
“calidad”, ya que de él depende la satisfacción de su pareja y su cualidad
como amante depende precisamente de esto.

Así que, en el modelo actual de erótica, el varón pasa a ser un “trabajador


cualificado” de “la cama”, que se convierte en una tarea en la que además de su
disfrute, ha de conseguir el máximo disfrute de su pareja. Y con ello, el varón
lleva sobre sí el peso de dos placeres.

En muchas ocasiones, el placer obtenido por la mujer en la relación erótica, es


considerado pues como una especie de “reconocimiento” a su “pericia” y valor como
amante.

Ya conocemos la frase de Gregorio Marañón: “No hay mujeres frígidas,


sino hombres inexpertos”. Es la frase que mejor represente la ideología de
este modelo.

Las consecuencias de este modelo ideológico (por lo que respecta a la


erótica) dominante en la actualidad, y los intentos por adecuarse a él, son una
constante fuente de problemas para el varón de hoy en día.

El papel del hombre en este modelo no es agradable. Si la mujer debe adoptar un


rol pasivo, y llega a las relaciones coitales, o genitales en general, desconociendo
en muchos casos su propio erotismo, el hombre en teoría debe adoptar el rol
complementario: él es el experto, el que sabe cómo y dónde y de qué forma debe
hacerse todo, el que debe dirigir el encuentro erótico.

Es importante señalar que se considera al hombre el experto en el encuentro


erótico, y sin embargo no por ello se le informa adecuadamente. Los hombres
tienen tan poca información sobre la erótica y la sexualidad humana como las
mujeres, o menos. Todo lo más, tienen más acceso a la pornografía (que está llena
de mitos e ideas erróneas).

La responsabilidad del hombre en el encuentro erótico es muy grande. De


él, de su supuesta pericia o supuesto dominio de las técnicas eróticas, depende su
Textos: María Victoria Ramírez Crespo y Ana Belén Carmona Rubio
ASOCIACIÓN LASEXOLOGIA.COM
TERAPIA SEXUAL Y DE PAREJA. SEXOLOGÍA Y PSICOLOGÍA. CURSOS Y TALLERES DE
EDUCACIÓN SEXUAL. FORMACION EN SEXOLOGIA.
Asociación Lasexologia.com. C/ Jacometrezo, nº 4, planta 8ª, oficina 14. 28013,
Madrid. España. Teléfono: (00 34) 91 523 08 14
E-mail: formacion@lasexologia.net www.lasexologia.com / www.lasexologia.net

propio placer y el placer de su compañera. La responsabilidad del placer de ambos


recae, por tanto, en el varón. Si ella no disfruta y no tiene orgasmos, será que “él
no se lo monta bien”.

Estas presiones por lograr el preciado orgasmo femenino con la pericia del varón se
centran sobre todo en su habilidad en la que se considera la técnica erótica por
excelencia: el coito, por supuesto. Las demás técnicas giran en torno al coito. Por
ejemplo, las caricias se conocen popularmente como “preliminares” (si se practican
caricias, tienen el objeto de preparar para el coito, y por lo tanto son caricias
preliminares).

La masturbación manual, la masturbación oral, las caricias sin coito… se consideran


técnicas inmaduras o sustitutivas cuando no se puede practicar el coito. Y al
ser devaluadas, varones y mujeres se pierden la ocasión de disfrutar de las
mismas.

Se considera que la erótica tiene que ver con el coito, y con los genitales,
principalmente. Todas aquellas técnicas que no incluyan los genitales (como las
caricias, los masajes sensuales) se consideran inmaduras, o preparatorias para “el
sexo de verdad” (el que atañe a los genitales). Y con ello, el varón también se
pierde el placer de disfrutar de la sensualidad y las caricias.

Si el varón debe demostrar su pericia, principalmente en el coito, una enorme parte


de la “responsabilidad” del encuentro erótico depende de su pene, y el
“comportamiento” que tenga el mismo en el encuentro coital,
comportamiento que se mide en tres parámetros que centran las
preocupaciones del personal masculino en la actualidad: el tamaño de su
pene, la dureza de su pene en erección, y el tiempo que “aguante” su pene
sin eyacular. Se supone (erróneamente) que cuanto mayor se el tamaño, la
dureza y el tiempo que aguante el pene, mayor será el placer femenino.

Puesto que estas creencias sobre el placer femenino, la responsabilidad del varón y
los criterios que lograrán (en teoría) un mayor placer femenino no tienen en
cuenta que la zona de mayor placer para la mujer es el clítoris, y que éste se
encuentra fuera de la vagina, y que por lo tanto por muy grande y duro que sea un
pene, y por mucho tiempo que tarde el hombre en eyacular, el placer femenino no
será mayor. Las parejas que hacen todo lo que se supone que hay que hacer, y no
logran los resultados apetecidos (orgasmo de ambos en coito), se frustran y buscan
un culpable.

En muchas ocasiones, debido a este modelo, se atribuyen al hombre (a su


falta de experiencia, pericia, tamaño de su pene…) los problemas que
muchas mujeres tienen para conseguir placer en las relaciones coitales. En
la mayoría de ocasiones, estos problemas son debidos precisamente a la falta de
autoconocimiento en la mujer que propicia la asunción de este modelo y la escasa
información y educación sexual existente. Esto suele generar complejos e
inseguridades en el varón que pueden devenir en una disfunción erótica o amatoria
en el mismo.

Es interesante señalar cómo el modelo actual de erótica, que tiene como aspecto
positivo el reconocimiento de la erótica de la mujer, y como aspecto negativo, el
considerar que dicha erótica depende de la pericia del varón, ha propiciado que el
Textos: María Victoria Ramírez Crespo y Ana Belén Carmona Rubio
ASOCIACIÓN LASEXOLOGIA.COM
TERAPIA SEXUAL Y DE PAREJA. SEXOLOGÍA Y PSICOLOGÍA. CURSOS Y TALLERES DE
EDUCACIÓN SEXUAL. FORMACION EN SEXOLOGIA.
Asociación Lasexologia.com. C/ Jacometrezo, nº 4, planta 8ª, oficina 14. 28013,
Madrid. España. Teléfono: (00 34) 91 523 08 14
E-mail: formacion@lasexologia.net www.lasexologia.com / www.lasexologia.net

número de varones con dificultades erectivas, preocupaciones por el


control de su eyaculación, y falta de deseo, se dispare en la actualidad. Los
varones, hoy en día, miden su pene, miden el tiempo que tardan en eyacular,
comprueban si la dureza de su pene es suficiente, y en general muestran una gran
preocupación por todos los temas relativos a su supuesto “rendimiento” coital, de
tal forma que muchos de ellos van a las relaciones eróticas genitales como quien va
a un examen de oposición, tan ansiosos que no disfrutan, y en muchos casos
acaban con alguna disfunción erótica o amatoria (dificultad erectiva, falta de deseo,
etc.).

María Victoria Ramírez Crespo.


Psicóloga y sexóloga.
Asociación Lasexologia.com
Teléfono: 91 523 08 14
www.lasexologia.net
www.lasexologia.com
Asociación Lasexologia.com. C/ Jacometrezo, nº 4, planta 8ª, oficina 14. 28013, Madrid. España.
Teléfono: (00 34) 91 523 08 14
E-mail: formacion@lasexologia.net www.lasexologia.com / www.lasexologia.net

Anda mungkin juga menyukai