El “Capital Social” se refiere a las conexiones entre personas; las redes informales de
confianza que proveen información, conocimiento y asistencia; así como las
satisfacciones emocionales de la comunidad.
Dentro de toda organización existe un recurso el cual es muy valioso y que sin el no se
podría hacer negocio, que es el recurso humano, este factor es el de mayor complejidad
en su administración y el único que viabiliza la generación de los demás recursos como
los financieros y tecnológicos.
Cuando este recurso interactúa con una organización inicia una relación con todos los
integrantes de ella y para que se genere capital social se tiene que cumplir con dos
premisas importantes que son la cooperación y la confianza, al darse estas dos, hace que
la calidad del trabajo aumente y de mayor satisfacción, pero un ambiente con esas
características solo se da cuando se construye relaciones informales de cooperación, es
decir relaciones en donde los colegas se ayudan mutuamente, sin importar el puesto en
que ambos se encuentren dentro de la organización.
Lo que se debe hacer para revertir todo esto en la empresa nacional es invertir en capital
social si queremos tener una Bolivia competitiva y prospera y la mayor inversión en
capital social que los líderes empresariales pueden llevar a cabo es construir y mantener
la confianza. ¿Cómo?: mostrando confiabilidad, siendo abiertos y francos, alentando la
franqueza y, sobre todo, confiando en los demás.