Muchos nios padecen trastornos del lenguaje que les impiden desenvolverse con soltura en el colegio o relacionarse bien con sus amigos y eso puede marcarles de por vida. La solucin est en dar al problema la importancia que merece y saber prevenir esas alteraciones del habla antes de que sea demasiado tarde.
La mayora de veces, cuando el habla de nuestro hijo no es todo lo fluida que debiera, solemos defendernos respondiendo que es ms avispado para otras cuestiones y restndole importancia, pero en la mayora de los casos -salvo que exista alguna alteracin fsica que lo impida- los trastornos del lenguaje son problemas que se pueden y se deben resolver y, por supuesto, prevenir.
Se calcula que uno de cada cinco nios entre 2 y 5 aos tiene problemas de lenguaje, pero no todos los nios que hablan mal pecan de lo mismo. Son muy diversos los problemas que se pueden presentar, aunque los ms frecuentes son:
La dislalia
La dislalia es el trastorno del lenguaje ms frecuente en los nios y normalmente no se le da importancia. Consiste en decir mal uno o varios sonidos e incluso puede llegar a darse la situacin de que lo que dice el nio sea totalmente ininteligible, es decir, imposible de comprender. Para poner un ejemplo, cuando un nio de ms de 4 aos, en lugar de "terror" dice "telol" o en lugar de "pera" dice "pela", tiene dislalia". Este trastorno tambin se da en el caso, menos frecuente, de que el nio olvide pronunciar un determinado sonido (por ejemplo "venana" por "ventana").
EL TARTAMUDEO
Suele aparecer entre los 3 y los 4 aos. Por lo general todos los nios del mundo tartamudean; unos lo hacen repitiendo alguna palabra o slaba y otros haciendo una pausa entre una palabra y otra, pero en ellos no tiene por qu ser algo permanente como ocurre con los adultos, simplemente forma parte de una de las etapas evolutivas del nio. Si el nio deja de hablar de manera repentina e inesperada, si el retraso en el lenguaje es muy evidente o confunde gran parte de los sonidos, en estos casos, la ayuda de un especialista se hace indispensable.
Como conclusin mencionar que nuestra labor como educadores es favorecer un ptimo desarrollo lingstico en nuestros nios, para que puedan adquirir una competencia comunicativa que posibilite su socializacin. Adems, no olvidemos que el lenguaje es un instrumento de comunicacin, pero tambin un instrumento del proceso de enseanzaaprendizaje.