BARCOS SOBRE LA PAMPA (1993)

DARDO SCAVINO

UMET Análisis del Capítulo 6to. Disciplina y discípulos.

 GUERRA Y POLÍTICA. Violencia y disciplina.
UMET

Para Sarmiento, la guerra es un medio (de utilización de la violencia) para

alcanzar un fín político: La guerra es la política por otros medios
(Clausewitz).
El objetivo es imponerle una voluntad al otro y podría alcanzarse
pacíficamente si el otro no se resistiera (Mito de la Modernidad de Dussel).
Sarmiento no quiere finalmente “exterminar” al gaucho y al indio sino
transformarlos en medios para el desarrollo de la civilización.
Violencia y disciplina, método y avances técnicos son las herramientas para
derrotar a la barbarie e introyectar la civilización en los cuerpos bárbaros
(humanos y sociales).
Método, disciplina, técnica y violencia pueden describir al ejército y/o a la
escuela. Para Sarmiento ejército y escuela son dispositivos tecnológicos
(instituciones) de la civilización.
 EXTENSIÓN Y OCIOSIDAD SIN LÍMITES
UMET

Dos son los impedimentos centrales que ve Sarmiento para su proyecto de

sociedad: El primero es “El desierto” – la campaña (“el mal que aqueja a la
Argentina es la extensión). El segundo es la “natural incapacidad de nuestra
población” (Civilización o Barbarie).
Sarmiento ve en la forma de vida del gaucho una traba para alcanzar la
civilización que desea para el país: “se distingue por el amor a la ociosidad e
incapacidad industrial, cuando la educación y las exigencias de una posición
social no vienen a ponerle espuela…”.
La naturaleza (la extensión) y la quietud (la ociosidad) son aliadas de la
barbarie y el atraso, mientras que el movimiento humano (la voluntad de la
historia) lo es de la civilización. Por lo que el objetivo político es “poner en
movimiento” la población. Hay en Sarmiento una incapacidad de ver y
valorar otras formas de organización de la existencia.
 ESCUELA Y EJÉRCITO. Tecnología social disciplinaria
UMET

Sarmiento contrasta la morosidad del habitante de la campaña con la

diligencia y actividad de los colonos europeos y se pregunta si se podrá
“fabricar” sujetos bajo ese modelo. ¿ Es posible modelar el barro de la
inepcia nacional?. Su respuesta es afirmativa. LA ESCUELA será la
“espuela moral” para acicatear y domar los cuerpos bárbaros.. “ La
instrucción derramada con intensidad, con profusión, con generosidad entre las
clase trabajadora, sólo puede obviar a la insuperable dificultad que a los
progresos de la industria oponen la incapacidad natural de nuestras gentes”.
Pero para llevar al gaucho a la escuela, primero hay que atraerlo al
ejército o derrotarlo a través de él. El ejército es fábrica móvil de una nueva
subjetividad.
Civilizarse es entonces para Sarmiento someterse a una disciplina,
domesticarse para poder normalizarse y “encajar” en las nuevas
relaciones sociales.
 DISCIPLINAR PARA NORMALIZAR
UMET

Para Sarmiento la educación “tiene por objetivo modificar el carácter,

disciplinar la inteligencia para prepararla a la instrucción y empezar a formar
hábitos de trabajo, de atención, de orden y de sumisión voluntaria”.
“la escuela, la gimnástica, la fila, la hilera, el compás van disminuyendo las
crispaciones; la regla, la repetición de los movimientos, vienen amansando al
animalito bípedo que cuando llega a la plenitud de su fuerza es un hombre y no
un tigre” (“Sobre instrucción popular” 1886).
Todo un avance desde cuando recomendara en plena guerra civil “Sandes ha
marchado a San Luis... Si va, déjelo ir. Si mata gente, cállense la boca. Son
animales bípedos de tan perversa condición que no sé qué se obtenga con
tratarlos mejor”. (Carta de Sarmiento a Mitre, marzo de 1862).
¿Cúal es la diferencia entre Sarmiento de 1862 y el de 1886?: Su
preocupación en el 62´ es como derrotar a un sujeto insurgente, en el 86´
como integrar a los derrotados al modelo de país que con él ha triunfado.
 CONSTRUIR SUJETOS ADAPTADOS
UMET

Ese triunfo de la civilización contra la barbarie lo pone frente a una realidad

paradójica: Las élites (fundamentalmente la oligarquía terrateniente en
creación) no comparten su utopía de desarrollo vía acceso a la tierra, el trabajo
y la educación para todos, pues se niegan a cualquier tipo de distribución de
la tierra y del poder político.
Una vez derrotado el Bárbaro, hay que someterlo a una operación de
ortopedia social que Sarmiento pautará meticulosamente en reglas y ritos
sistematizados, porque aprender es contraer hábitos. Esos hábitos seguirán el
diseño de la división internacional y desigual del trabajo.
La escuela se convierte en una fábrica, en una usina de instrucción. En una
máquina de absorber y reglar el tiempo para capturar el “exceso de vida” del
gaucho reorientándolo. Pues allí donde no hay fábricas; pueden crearse los
trabajadores que las habitarán a través de la disciplina/domesticación que el
ejército y la escuela permiten imprimir sobre los cuerpos.
 LAS LEYES Y LAS INSTITUCIONES
UMET

Para Sarmiento la Organización Nacional no es tanto un asunto de

leyes como de instituciones. La ley pretende impedir las acciones, limitar
sus alcances, reglamentar sus aplicaciones. Las instituciones, en cambio,
son medios para la satisfacción de necesidades reemplazando los
instintos naturales y bárbaros.
La institución por un lado satisface necesidades pero por otro para
hacerlo, constriñe el cuerpo para adquirir las destrezas necesarias para tal
satisfacción.
En la pampa como medio; al no haber necesidades que impliquen un
desafío, no hay necesidad de asociación y por ende no hay instituciones. El
gaucho es libre de necesidades. Hay que cambiar su medio (ejército,
escuela y economía) para poder incluirlo. Tal es el programa de la
Generación del 80.
SARMIENTO ENTRE LA CIVILIZACIÓN Y LA BARBARIE
UMET

https://youtu.be/8c8eyMnPtck