vs. Argentina
Competencia
La Corte determinó que la guarda judicial que culminó en la adopción simple de M se otorgó
sin observar ciertos requisitos normativos, tales como el consentimiento del padre biológico y
la ausencia de verificación de las demás condiciones establecidas en el artículo 317 del CC.
De tal modo, la injerencia en el derecho de protección a la familia del señor Fornerón y de su
hija M no observó el requisito de legalidad de la restricción.
Por otra parte, el referido juez tampoco determinó la existencia de alguna de las circunstancias
excepcionales establecidas por la Convención sobre los Derechos del Niño, tales como “casos
en los que el niño sea objeto de maltrato o descuido por parte de sus padres”, que hubieran
permitido, excepcionalmente, la separación del padre de su hija.
Derechos vulnerados
Artículo 8. Garantías Judiciales 1. Toda persona tiene derecho a ser oída, con las
debidas garantías y dentro de un plazo razonable, por un
juez o tribunal competente, independiente e imparcial,
establecido con anterioridad por la ley, en la sustanciación
de cualquier acusación penal formulada contra ella, o
para la determinación de sus derechos y obligaciones de
orden civil, laboral, fiscal o de cualquier otro carácter.
Artículo 25. Protección Judicial 1. Toda persona tiene derecho a un recurso sencillo y
rápido o a cualquier otro recurso efectivo ante los jueces
o tribunales competentes, que la ampare contra actos que
violen sus derechos fundamentales reconocidos por la
Constitución, la ley o la presente Convención, aun cuando
tal violación sea cometida por personas que actúen en
ejercicio de sus funciones oficiales.
Artículo 19. Derechos del Niño Todo niño tiene derecho a las medidas de protección que
su condición de menor requieren por parte de su familia,
de la sociedad y del Estado.
Sentencia
El Estado debe adoptar las medidas que sean necesarias para tipificar la
venta de niños y niñas, de manera que el acto de entregar un niño o niña a
cambio de una retribución o cualquier otra compensación, cualquiera que sea
su forma o fin, constituya una infracción penal.
El Estado debe pagar las cantidades fijadas en los párrafos 191, 192, 197 y 204 a 206 de
la presente Sentencia, por concepto de indemnización por daño material e inmaterial y
por el reintegro de costas y gastos, según corresponda, en los términos de los párrafos
207 y 211 a 217 de la misma, así como reintegrar al Fondo de Asistencia Legal de
Víctimas la cantidad establecida en el párrafo 210 de la presente Sentencia.
El Estado debe, sin perjuicio de lo indicado en el punto resolutivo segundo, dentro del
plazo de un año contado a partir de la notificación de esta Sentencia, rendir al Tribunal
un informe sobre las medidas adoptadas para cumplir con la misma.