Objetivos

• Tener un amplio conocimiento de lo que es la

violencia domestica.
• Brindar las alternativas encontradas en la
investigación y a la vez educar a la población
estudiantil para prevenir la violencia domestica.
• Buscamos a través del análisis y las entrevistas
realizadas, proveerle a los compañeros a que
tengan más conocimientos sobre las agencias
que trabajan con esta población.
 Bosquejo
• Introducción
• ¿Qué es violencia doméstica?
• Ley # 54 del 15 de agosto de 1989
• Tipos de maltrato
• Rueda de poder y control
• Mitos y realidades sobre la violencia doméstica
• El ciclo de la violencia doméstica
• Características del posible agresor
• Para salir de una relación de maltrato
• Entrevistas
 ¿Qué es violencia doméstica?
• Es una conducta criminal que, en la actualidad,
constituye unos de los problemas más serios que
confronta la familia y las sociedades puertorriqueñas. Se
trata de violencia entre personas que participan del
mismo núcleo familiar y comparten o compartieron una
relación.
• La violencia se manifiesta, principalmente, en el maltrato
físico, sexual y emocional que sufre una persona a
manos de un cónyuge o ex-cónyuge, o de una persona
con quien se sostiene o se ha sostenido una relación
intima o con quien se ha procreado un hijo (a).
 Ley # 54 del 15 de agosto de 1989
• La Ley 54, trata sobre la violencia doméstica
en relación de pareja. La ley estableció la
política pública que constituye la violencia
doméstica como delito grave y que puede
conllevar cárcel entre otras penas. Es una ley
especial que tiene aspectos procesales, civiles
y penales.
 Ley # 54 del 15 de agosto de 1989
• ¿Qué es violencia doméstica según la ley 54?
– El empleo de fuerza física, violencia psicológica,
intimidación o prosecución contra la pareja con el
propósito de causarle daño físico o emocionales a su
persona, sus seres queridos o sus bienes.

• ¿Cómo define la ley 54 “una pareja”?

– Es un cónyuge, ex cónyuge, una persona con quien se ha
cohabitado, una persona con quien se sostiene o se ha
sometido una relación consensual o una persona con
quien se ha procreado un hijo o una hija.
 Ley # 54 del 15 de agosto de 1989
• ¿Qué remedio provee la ley 54?
– La ley provee dos remedios uno civil y uno criminal. Estas aplican
a cualquier persona victimas/sobrevivientes de violencia
doméstica, independientemente de su sexo u orientación sexual.
– Ordenes de protección: Son medidas legales de tipo civil
que otorga el Tribunal para proteger la seguridad y
satisfacer las necesidades básicas de las víctimas de
violencia doméstica y sus hijas. Se pueden solicitar en
cualquier tribunal y no es necesario radicar cargos
criminales para obtenerla. La orden puede prohibir que la
parte agresora se acerque a la víctima, a su casa o a la de
sus familiares, a su trabajo, a su lugar de estudio, o a
donde quiera que ésta se encuentre.
 Ley # 54 del 15 de agosto de 1989
– Radicación de casos criminales: La Ley 54 establece cinco
tipos de delitos graves con sus penas mínimas y máximas que
pueden ser radicados en cualquier tribunal. Estos son:
» Maltrato
» Maltrato agravado
» Maltrato mediante amenaza
» Restricción de libertad
» Agresión sexual conyugal
• ¿Se pueden retirar los cargos por violencia doméstica?
– Una víctima puede tener varias razones para retirar los cargos, sin
embargo, el Departamento de Justicia se hará cargo de seguir el
proceso del caso. La violencia doméstica es un delito contra la
persona afectada y contra el Estado también.
 Tipos de maltrato
• Maltrato físico: Hacer uso de la fuerza física para causar daño a la pareja o para obligarla
a realizar algún acto que esta no desea. Incluye golpes, patadas, puños, empujones,
mordiscos, fracturas, heridas, mutilaciones, etc. En algunas circunstancias que agravan
las situaciones se utilizan armas como cuchillos, machetes, bates y armas de fuego.

• Maltrato psicológico: Desvalorizar y ridiculizar a la pareja haciéndola sentir mal con ella
misma y empobreciendo su autoestima. Utilizar la violencia, la restricción de la libertad
o la intimidación contra la pareja para controlar lo que esta hace, con quien se relaciona
a donde va. Prohibirle u obstacularizar sus planes de estudio o trabajo y amenazarla, así
como, utilizar otras estrategias para ejercer poder y control sobre ella.

• Maltrato sexual: Utilizar la violencia en los acercamientos sexuales y tratar a la pareja

como objeto sexual. Exigir relaciones sin el consentimiento ni deseo de la pareja. Obligar
a la pareja a prácticas sexuales no deseadas o agredirla en sus partes sexuales.
 Mitos y Realidades sobre la violencia doméstica
La mujer que es maltratada es
porque le gusta.
Las mujeres provocan la violencia de
su pareja.
El maltrato es más común entre las
clases pobres.
La persona que maltrata es violenta
en todas sus relaciones
interpersonales.
El alcohol y las drogas son la causa de
la violencia doméstica.
Los agresores son locos psicópatas.
Los agresores no pueden mostrarse
amorosos, siempre expresan enojo y
violencia hacia su pareja.
Un agresor no puede cambiar ni
dejar de ser violento.
Aguantando y evitando molestar a la
pareja se puede controlar su
conducta agresiva.
La violencia doméstica contra la
pareja sólo se da de parte de los
hombres hacia las mujeres.
A nadie le gusta ser maltratado/a o humillado/a. La socialización le ha enseñado a las mujeres a ver el maltrato como
algo común en la vida de pareja. Muchas veces, las mujeres, se sienten responsables de las expresiones violentas de su
pareja o asumen estrategias de resistencia para sobrevivir como la sumisión o el ser extremadamente complacientes.
Esta es una concepción popular en nuestra cultura que justifica la conducta del agresor/a. El usar la violencia es una
opción que decide el/la agresor/a y sólo esa persona es responsable de la misma y puede controlarla.
El maltrato no escoge clase social. Todas las mujeres, por el hecho de ser mujeres, podemos sufrir maltrato por parte
de una pareja violenta. Sin embargo, las mujeres pobres, generalmente, acuden en busca de ayuda a hospitales
públicos que documentan su experiencia. Las mujeres con recursos económicos van a profesionales de salud y
hospitales privados que no sacan a la luz pública este tipo de casos.
Muchos hombres son violentos, sin embargo, muchos sólo son maltratantes con sus esposas o compañeras.
La causa de la violencia doméstica se identifica en las relaciones de poder desigual entre hombres y mujeres. El alcohol
y las drogas no son la causa aunque en muchos casos puede agravarla. Muchas de las personas que beben o usan
drogas pero no maltratan a su pareja de igual forma, muchos/as de los/as agresores/es no beben ni consumen drogas.
Se ha encontrado que la mayoría de los agresores no son psicópatas. Son personas manipuladoras y poseedoras de
cierto encanto personal, que tratan de conseguir lo que quieren de su pareja sin tomar en cuenta sus intereses y
necesidades. Son personas que pueden funcionar muy bien con otras personas, su abuso de poder es sólo con su
pareja.
En ocasiones los agresores pueden mostrarse amorosos, simpáticos y atentos con su pareja, eso confunde los
sentimientos de la víctima.
La conducta violenta es aprendida y puede ser modificada. Esto requiere de una intervención profesional que facilite desarrollar estilos no
violentos de relacionarse en pareja.
Esta es una estrategia de resistencia que utilizan muchas víctimas de violencia doméstica para sobrevivir, sin embargo,
esto no detendrá la violencia y pone en riesgo su salud física y mental.
Las estadísticas señalan que en casi el 90% de los casos registrados la violencia se da por parte de los hombres hacia
mujeres, sin embargo, ésta se puede dar de mujeres hacia hombres y en relaciones del mismo sexo (de mujeres hacia
mujeres y de hombres hacia hombre).
 El Ciclo de la violencia doméstica
1. Fase de tensión
Esta etapa puede durar desde algunas horas hasta meses o años. La
victima se da cuenta de que se está acumulando tensión y trata muchas
maneras de agradar y bromear con su pareja para tratar de evitar la
violencia.
La violencia va aumentando, comienzan las discusiones verbales y las
amenazas. La victima siente miedo y se vuelve excesivamente
complaciente tratando de evitar incidentes de mayor intensidad.

3. Fase de arrepentimiento 2.Fase de agresión

y reconciliación
El agresor se siente avergonzado, culpable, pide
perdón y promete que la violencia nunca volverá a
ocurrir. Es posible que compre regalos costosos y
atienda a la víctima con extremada cortesía.
La víctima alberga esperanzas de cambio y
considera darle otra oportunidad a la relación, sin
embargo, muchas veces, esta fase se desvanece
pronto y comienza a acumularse nuevamente la
tensión.
La agresión puede ser desencadenada por una discusión
insignificante sobre la comida, la TV o cualquier otro
problema con o sin importancia. Generalmente, es aquí
donde ocurre el maltrato físico: empujones, bofetadas,
puñetazos, patadas, abuso sexual, intentos de asesinato
y otros.
Una vez comienza el ataque, generalmente, es poco lo
que la víctima puede hacer para detenerlo. Esta tiende a
culpabilizarse, y a minimizar o negar las agresiones.
Pedir disculpas o razonar con el agresor rara vez resulta
efectivo. Es en esta etapa cuando muchas buscan ayuda.
 Características del posible agresor
• Amenaza con cometer suicidio u
homicidio
• Historial de conducta agresiva
• Historial de violencia en su familia
• Conducta de control centralizada
en la pareja
• Expectativas irreales de la pareja
• Tiene enamoramiento rápido
• Amenaza con violencia o
agresiones pasadas
• Abusa verbalmente o emplea la
fuerza
• Usa la fuerza durante la relación
sexual
• Se aísla y es hipersensitivo
• Es cruel con las niñas
• Responsabiliza a otra por sus
emociones
• Sufre cambios súbitos de humor
• Es hostil hacia las mujeres
• Conducta antisocial
• Dominante y controlador
• Celoso compulsivo
• Tiene valores tradicionales y
sexistas
• Abusa de niñas o mascotas
• Abuso de alcohol
 Para salir de una relación de maltrato
• Reconoce el maltrato e identifica los indicadores de violencia en tu pareja.
• Toma la decisión de salir de la relación violenta y prepárate para hacerlo.
• No guardes silencio. Habla con personas de tu confianza sobre la situación, podrían
ayudarte o servirte de testigo.
• Prepara un plan de escape para un caso de emergencia.
• Documentación familiar (certificados de nacimientos, seguro social, planes
médicos, documentos médicos, documentos escolares, etc.).
• Pasaporte, tarjeta de residencia y permiso de trabajo, licencia de conducir.
• Documentos importantes (copia de contrato de vivienda, escrituras de vivienda,
cualquier otro documento judicial).
• Documentos de cuentas bancarias, copia de talonarios de cheques de la pareja)
• Ropa, medicamentos, llaves, algo de dinero, listas de teléfono de familiares o
agencias de gobierno.
• Todo lo que pueda ser útil a la hora de presentarse ante un juez.
 Para salir de una relación de maltrato
• Desarrolla una red de apoyo entre familiares y amigas que te
puedan ofrecer apoyo y protección de ser necesario.
• Identifica organizaciones o grupos de apoyo que trabajen con
víctimas/ sobrevivientes de violencia doméstica y acude a ellos,
pueden ayudarte.
• Busca un empleo o adiestramiento que te permita independencia
económica.
• Utiliza la Ley 54 para obtener protección de la Policía y los
tribunales.
• Confía en ti misma. Muchas mujeres han sobrevivido a una relación
maltratante y ahora viven en paz.
 Entrevista
• Lilliam I. Román Hernández
– A: Ivette Arlene Ramos Acevedo, Trabajadora Social con una
maestría en Trabajo Social obtenida de la Escuela Graduada
Beatriz Lasalle del Recinto de Rio Piedras.
– Puesto: Trabajadora Social.
– Preparación Académica: Bachillerato en Trabajo Social y una
Maestría en Trabajo Social
– Agencia: Casa Protegida Julio de Burgos en San Juan
– Directora Ejecutiva: Ursula Colón
– Teléfono: 787-723-3500
 Entrevista
• Rosangeles Rosado
– A:Maritza Sánchez, Trabajadora Social
– Puesto: Coordinadora de grupos de apoyo victimas y
sobrevivientes de violencia domestica.
– Preparación Académica: Bachillerato en Trabajo Social
– Agencia: PAEC (Programa de Apoyo y Enlace
Comunitario)
– Supervisora: Sra. Maria A. Hernández
– Teléfono: 787-252-3439
 Entrevista
• Mariano
– A: Iván Pérez Nieves
– Puesto: Agente
– Preparación Académica: Bachillerato en Justicia
Criminal
– Agencia: Policía de Puerto Rico
– Director de la agencia: Pedro Toledo
– Nombre del supervisor: Capitán Rodríguez
– Teléfono: (787)-793-1234
 Entrevista
• Ana Lorenzo González
– A: Luz C. Méndez
– Puesto: Trabajadora Social
– Preparación Académica: Bachillerato en Trabajo
Social
– Agencia: Escuela Elemental Mínima Oronoz
situada en la Urbanización Pepino de San
Sebastián
– Directora de la Agencia: Ivia Sánchez.
– Teléfono: 787-869-4669.
 Entrevista
• Naycha M. Pérez
– A: Ivelisse González Crespo
– Puesto: Enfermera
– Agencia: Hospital San Antonio, Mayagüez
– Supervisora: Sra. Lourdes Franki
– Director de la agencia: Lic. Francisco Martínez