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Análisis Formal e Iconológico

de Arte Paleocristiano

El Sarcófago de Junio Baso


Sarcófago de Junio Basso
S. IV a.C.
DESCRIPCIÓN PREICONOGRÁFICA
Análisis Formal
Plano de Representación
Es tridimensional, sin embargo las representaciones están trabajadas en alto relieve, es decir, a
pesar de que no dejan el plano bidimensional como lo haría una obra escultórica, están cerca de
ello.
Lo que vemos aquí es una de las tres caras trabajadas del sarcófago, la envolvente mayor del
plano es rectangular en una dirección horizontal.
Ritmo
El ritmo visual existe en dirección vertical con 6 repeticiones marcadas con columnas que
encuadran una secuencia de escenas. También hay ritmo horizontal marcado en los
Extremos y en medio de las dos filas de escenas ya que son 10 escenas divididas en dos niveles
con 5 cada uno.
Los techos del registro superior son adintelados, en el registro inferior encontramos un ritmo
alternado generado por arcos semicirculares y de medio punto. En los casos en los que
encontramos arcos semicirculares, se crea la ilusión de un techo abovedado ya que se emplea una
concha marina, lo cual debe implicar un significado más profundo.
Espacio
El espacio y la profundidad de
esta obra están resueltas con la
superposición de planos,
tomemos como ejemplo la
primer escena del sarcófago para
observarlo.

Rojo- primer plano


Verde- segundo plano
Azul- tercer plano
Violeta- cuarto plano
El árbol que está detrás de la
mano de la figura del primer
plano es el último plano antes del
fondo.
DESCRIPCIÓN PREICONOGRÁFICA
Contenido temático natural o Primario
Podemos observar que están talladas figuras humanas masculinas a excepción de dos femeninas.
Están separadas por columnas con capitel de una variedad corintia y estriadas en espiral, sólo las
que encuadran a las escenas de la mitad tienen una decoración distinta del fuste, con ramas y
personajes pequeños. La mayoría de los hombres están descalzos y ataviados con una toga.
Podemos identificar a los personajes representados en las columnas
decoradas que encuadran las escenas de Cristo enseñando la Ley a
Pedro y Pablo y Cristo entrando a Jerusalén como cupidos entre
viñedos. A estos motivos ornamentales se les llama putti (plural de
putto en italiano) que viene del latín putus que significa niño, que
representan niños desnudos alados o querubines en escenas que
sustituyen a adultos realizando trabajos de campo, en este caso
recolectando la vid1.

1
Grabar, André. Las vías de la creación de la iconografía cristiana. Alianza Forma. Madrid, 1985.
p.113
Los personajes están dispuestos en su mayoría en grupos de tres y con una composición
triangular, lo cual genera equilibrio visual y en la mayoría de los casos simetría axial.
También existen diagonales de tensión en 45º. Aunque no lo veamos explícitamente en la
composición, hay líneas horizontales marcadas.
Análisis Iconográfico: La mayoría de las escenas presentadas en el sarcófago pertenecen tanto al Antiguo
Testamento (ej. Sacrificio de Isaac) como al Nuevo Testamento (ej. Entrada de Cristo a Jerusalén).

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Hay una diagonal que va de la mano de Dios en la primera escena a la última, Pablo
siendo llevado hacia el Sacrifio. La mirada de Abraham es hacia el exterior, también la
dirección del cuerpo de Pablo da cara al exterior 1.

1
“The Early Christians and Their Art” in History of Art. Disponible en : http://www.all-art.org/history124.html
Sacrificio de Isaac.
Esta escena se encuentra narrada
en el Antiguo Testamento, en el
Génesis.

Como prueba de su fidelidad,


Dios le pide a Abraham que
sacrifique a su único hijo Isaac.
Cuando llegan al monte Moria, y
Abraham está listo para degollar a
su hijo con el cuchillo, un ángel
aparece confirmando su fé quien
le dice que no le haga nada a
Isaac. Abraham vio a su alrededor
y encontró un carnero con los
cuernos enredados en un zarzal.
Fue por él y lo ofreció en
sacrificio en lugar de su hijo2.
Se observa la mano de Abraham
con el mango del cuchillo, y
dentro del círculo rojo, la mano de
Dios.
Carmona Muela, Juan. Iconografía Cristiana. Guía Básica para estudiantes. Istmo. Toledo, 2001. pp. 42-44 y “Génesis, El sacrificio de Isaac” La biblia. Verbo
2

Divino. Madrid, 2008. Génesis 22.


Traditio Legis

En esta escena vemos en el


centro a Cristo sentado en un
taburete representado como
un joven imberbe entre los
apóstoles más importantes
para Roma: Pedro y Pablo.
Cristo está entregando un
papiro, que simboliza la
doctrina cristiana.
Bajo los pies de Cristo
encontramos a un personaje
barbudo, es Caleo (Urano),
el Dios del cielo que tiene un
velo que representa el
firmamento.
La Enfermedad de Job

Esta escena también está narrada en el


Antiguo Testamento. Job era un
campesino rico que tenía varios hijos
y una esposa. Satanás reta a Dios
diciéndole que Job sólo cree en el
debido a sus bendiciones, entonces
Dios deja que Satanás lo ponga a
prueba sin quitarle la vida. Job sufre
muchas malas rachas, sus hijos
mueren, él enferma (úlceras en la
piel), pierde su ganado, etc. sin
embargo, Job demuestra ser paciente
y sigue creyendo en Dios. De esta
manera Dios comprueba que Job tiene
autentica fé en él, no por sus
bendiciones. Dios lo premia más tarde
devolviéndole el doble de su riqueza,
hijos, ganado, etc.
Adán y Eva

Este relato del Antiguo Testamento se


encuentra en el Génesis. Dios dispuso a
Adán y a Eva en el paraíso, en el jardín
del Edén. Les dijo que podían
alimentarse de todos los árboles menos
de uno, el del bien y del mal. Eva fue
tentada por Satanás en forma de
serpiente a probar el fruto prohibido,
una manzana que también le dio a
probar a Adán. Esto les valió la
expulsión del paraíso. Este fue el
pecado originario de la humanidad. Es
decir, el hombre es producto del
pecado.
Análisis Iconológico

El sarcófago de Junio Basso, un importante patricio que se convirtió al cristianismo poco antes
de su muerte, está datado del 359 d.C. Este tipo de sarcófagos tienen un antecedente en los
sarcófagos romanos, también trabajados en mármol. La iconografía cristiana de éste periodo es
muy interesante porque retoma fórmulas romanas como la Traditio Legis que era empleada para
hacer visible que el emperador era la única y verdadera fuente de ley, ahora es Cristo a quien se
le atribuye esta autoridad metafóricamente. La popularidad de esta fórmula en el siglo IV d.C. se
debe a la necesidad de establecer la doctrina cristiana ortodoxa.

Sarcófago del Triunfo de Dionisos y las estaciones. ca. 260–270.


http://www.metmuseum.org/toah/works-of-art/55.11.5
Otra de las fórmulas recurrentes en el arte romano es el adventis. Son escenas que
representan al emperador o a algún soldado triunfante entrando a la ciudad, en especial
a Roma después de alguna batalla. Se muestran también varias figuras que le rinden
homenaje.
De manera que se le atribuye a Cristo una visión
semejante a la que se le tenía a los soldados que eran
hombres virtuosos y admirados por sus hazañas
militares. A diferencia de éstos, Cristo es triunfante
ante las batallas de la fé y en lugar de hazañas militares
encontramos episodios que muestran a un Cristo
taumaturgo, que concede milagros. La escena de
Daniel entre dos leones nos remite a esto, es una forma
de decir: “Si crees en Dios él te salvará, el es el único y
verdadero juez”.
La representación del paciente Job, es una evocación
de Junio Basso, es una manera no evidente de decir que
así como Job era un creyente auténtico de Dios, Junio
Basso lo fue.
La escena de la expulsión del paraíso está para hacer
presente que Cristo vino a salvarnos de nuestros
El Emperador Marco Aurelio 176-80 AD.
http://employees.oneonta.edu/farberas/arth/ar
pecados y por ello se sacrificó.
th212/Santa_Maria_Maggiore.html
La representación de Cristo.

En el siglo IV existían varias figuras alegóricas de Cristo o distintas representaciones.


Por un lado encontramos al Buen Pastor, por otro a Cristo representado como joven
imberbe (imagen inspirada en la representación de Apolo), Cristo como un joven
filósofo:
“(…) para la exégesis moderna no cabe ninguna duda de que el
hombre barbado, con el torso desnudo o medio desnudo, revestido con
pallium y sentado en un taburete, frecuentemente leyendo un libro sea
cristo, presentado como el poseedor de la <<verdadera filosofía>>”

La presencia de varias escenas de sacrificio es una intención de recordar que así


como Abraham sacrificó a su hijo, Dios padre sacrificó a su hijo para salvar a los
hombres del pecado desencadenado por el pecado original, representado también
con Adán y Eva.
Referencias Documentales

Bibliografía

Grabar, André. Las vías de la creación de la iconografía cristiana. Alianza


Forma. Madrid, 1985.
Carmona Muela, Juan. Iconografía Cristiana. Guía Básica para estudiantes.
Istmo. Toledo, 2001. pp. 42-44
La biblia. Verbo Divino. Madrid, 2008.

Smart History
http://smarthistory.org/sarcophagus-of-junius-bassus.html
Diccionario de la Real Academia Española
www.rae.es
The Metropolitan Museum of Art
http://www.metmuseum.org/toah/works-of-art/55.11.5

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