Parte II Alejandro Jesús Ceballos Márquez Por ejemplo, debemos tener una rasqueta, con la cual realizamos masajes al caballo y limpiamos la suciedad que queda en él. Un cepillo de raíces es ideal para mantener su cabello pulcro y desenredado, mientras que el peine de crines es ideal para esta zona sensible porque está adaptando para la limpieza y desenredo de las hebras de su cola y finalmente se necesita de un cepillo blando para limpiar la zona de la cabeza, el rostro y las orejas. Alejandro Jesús Ceballos Márquez Los cascos: La limpieza en los cascos es de suma importancia pues son estos los que sostienen su peso y permiten que realicen sus actividades físicas, por lo que se deben mantener cuidados y libre de heridas, infecciones o cualquier enfermedad cutánea.
Alejandro Jesús Ceballos Márquez
Para hacerlo de forma correcta, se debe pedir permiso al caballo, a través de suaves caricias a la pierna que vayamos a limpiar y se deben utilizar los limpiacascos para la zona más dura y los escarbacascos para remover pequeños objetos y suciedades que se incrustan en los cascos.
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El aseo del caballo no es solo una responsabilidad que adquirimos cuando decidimos tener uno como mascota, sino que además resulta en una de las lecciones más valiosas que otorga la equinoterapia, ya que a través de la higiene se logra establecer un lazo especial con el animal, se genera confianza y se adquiere una nueva perspectiva de nosotros mismos y nuestras habilidades sociales.