En primer lugar, es importante saber que la longevidad de un toldo se mide por la duración de sus
componentes y ésta por la calidad de los mismos.
Un sistema de calidad tiene una duración de, aproximadamente, 20 años; y una lona, de unos 10.
Es aconsejable que no renuncie a las prestaciones de los productos de alta calidad. Sólo ellos le
garantizan una adecuada resistencia a las agresiones a las que están sometidos durante todo el
año: humedad, corrosión, radiación solar, etc
EL LUGAR DE LA INSTALACION
La orientación solar:
Debemos tener en cuenta que la incidencia del sol sobre la vivienda varía según su
orientación y el momento del día. Una mayor y correcta inclinación del toldo o un faldón
regulable nos ayudará a conseguir la proyección de sombra necesaria.
La sujeción