Propuesta en 1776, la teoría de Smith fue la primera en
explicar por qué el libre comercio, sin restricción alguna, es beneficioso para un país.
El libre comercio ocurre cuando un gobierno no intenta
influir, a través de cuotas o impuestos, lo que sus ciudadanos pueden comprar , o lo que pueden producir o vender, a otro país. Teoría del comercio
Smith sostenía que la mano invisible del mecanismo de
mercado, y no de la política gubernamental debía determinar lo que un país exportaba o importaba. Sus argumentos implicaban que una postura tal de laissez-faire hacia el comercio era lo mejor para los intereses de un país. Con base en la obra de Smith, se construyen dos teorías adicionales. La teoría de la ventaja comparativa, promovida por el economista ingles David Ricardo. Esta teoría es la base intelectual del argumento moderno a favor del libre comercio ilimitado.
La obra ricardiana fue perfeccionada por dos economistas
suecos, Eli Heckscher y Bertil Ohlin, cuya obra se conoce como la teoría Heckscher – Ohlin. En un trabajo relacionado con la nueva teoría del comercio, Michael Porter de la Escuela de Negocios de Harvard desarrolla la teoría de la teoría de la ventaja competitiva nacional, que intenta explicar por qué ciertas naciones alcanzan éxito internacional en industrias particulares. Como los teóricos del nuevo comercio, además de la dotación de factores, Porter señala la importancia de ciertos factores nacionales, como la demanda y la rivalidad dentro de un país, al explicar el dominio de una nación en la producción y la exportación de artículos determinados. Teoría del Comercio y Políticas Gubernamentales
Aunque todas estas teorías coinciden en que el
comercio internacional es benéfico para un país, discrepan en sus recomendaciones para la adopción de una política gubernamental. El mercantilismo claramente se sostiene a favor de la participación gubernamental en cuanto a la promoción de exportaciones y la limitación de importaciones. Las teorías de Smith, Ricardo y Heckscher-Ohlin forman parte del caso a favor del libre comercio ilimitado El argumento a favor del libre comercio sin limites consiste en que tanto los controles de importación como los incentivos de exportación (subsidios, por ejemplo) son contraproducentes y producen un desperdicio de recursos. Tanto la nueva teoría del comercio como la teoría de Porter sobre la ventaja competitiva nacional pueden interpretarse como una justificación a cierta intervención - limitada y selectiva - del gobierno para apoyar el desarrollo de ciertas industrias orientadas a la exportación. Mercantilismo
La primera teoría del comercio internacional surgió en
Inglaterra a mediados del siglo XVI. Conocida como mercantilismo, su declaración de principios consistía en que el oro y la plata eran los pilares fundamentales de la riqueza nacional y eran esenciales para un comercio vigoroso. En ese tiempo, el oro y la plata eran la moneda de cambio entre los países; un país podía ganar oro y plata mediante la exportación de sus productos.
Por el mismo motivo, la importación de artículos de
otros países provocaría un flujo de oro y plata hacia el exterior de los países en cuestión. El principio fundamental del mercantilismo planteaba que era conveniente para un país mantener un excedente de comercio, a través de un mayor nivel de exportación que de importación. Al hacerlo, un país acumularía oro y plata e incrementaría su riqueza y prestigio nacionales. Como el escritor mercantilista ingles Thomas Mun, estableció en 1630:
El medio lógico para incrementar nuestra riqueza y
tesoro es el comercio extranjero, que debe regirse por la siguiente regla: vender más a los extranjeros año con año que consumir de ellos , en valor. En conformidad con esta creencia, la doctrina mercantilista defendía la intervención gubernamental para lograr un excedente en la balanza de comercio. Recomendaba políticas para maximizar las exportaciones y minimizar las importaciones. Para lograrlo, las importaciones estaban restringidas mediante aranceles y cuotas y las exportaciones eran objeto de subsidio. Ventaja Absoluta
En su obra clásica The Wealth of Nations (1776),
Adam Smith atacó la suposición mercantilista en torno a que el comercio es un “ juego de suma cero”. Smith argumentó que los países difieren en su capacidad para producir artículos de manera eficiente. De acuerdo con Smith, los países deben especializarse en la producción de mercancías para las que tengan ventaja absoluta, y posteriormente intercambiar estos productos por artículos producidos en otros países. Ventaja Comparativa
David Ricardo llevó la teoría de Adam Smith un
paso hacia delante, al explorar lo que podría pasar cuando un país tiene ventaja absoluta en la producción de todas las mercancías. La teoría de Smith sobre la ventaja absoluta sugiere que tal país probablemente no se beneficiaria del comercio internacional.
En su libro Principles of Political Economy (1817),
Ricardo demostró que éste no era el caso. De acuerdo con la teoría de Ricardo sobre la ventaja comparativa, un país debe especializarse en aquellos bienes y servicios que puedan producir de manera mas eficiente y adquirir, de otros países, aquellos que produzca de manera menos eficiente, incluso cuando, en ocasiones, esto represente adquirir bienes extranjeros cuya producción nacional pudiese ser más eficiente. Teoría de Heckscher- Ohlin
La teoría ricardiana subraya que la ventaja comparativa
es resultado de las diferencias en la productividad. Ricardo paulatinamente destacaba la productividad de la mano de obra y sostenía que las diferencias en la productividad de la mano de obra entre las naciones son la base de la noción de la ventaja comparativa. Los economistas suecos Eli Heckscher (en 1919) y Bertil Ohlin (en 1933) expusieron una explicación distinta de la ventaja comparativa.
Ambos aseveraron que la ventaja comparativa es
producto de las diferencias en la dotación nacional de factores. Por dotación de factores, quisieron decir el grado en que un país ha sido favorecido con recursos tales como tierra, mano de obra y capital. Distintas naciones cuentan con distintas dotaciones de factores , y distintas dotaciones de factores explican las diferencias en los costos relativos a los factores. Entre mas abundante es un factor, menor es su costo. La teoría de Heckscher - Ohlin intenta explicar el patrón del comercio internacional que podemos observar en la economía mundial. Como la teoría ricardiana, la de Heckscher - Ohlin sostiene que el libre comercio es benéfico. Sin embargo, a diferencia de la teoría ricardiana la de Heckscher - Ohlin afirma que el patrón de comercio internacional es producto de las diferencias en la dotación de factores, y no de las diferencias en la productividad. La teoría del ciclo de vida del producto
Raymond Vernon inicialmente propuso la teoría del
ciclo de vida del producto a mediados de los sesenta. La teoría Vernon se basaba en que, una gran proporción de los nuevos productos del mundo había sido desarrollada por firmas estadounidenses y se había vendido por primera vez en Estados Unidos A modo de explicación, Vernon afirmó que la riqueza y el tamaño del mercado estadounidense daban a las firmas de este país un incentivo más fuerte para desarrollar nuevos productos para el consumidor. El hecho de que un nuevo producto sea desarrollado por una firma estadounidense y vendido por primera vez en Estados Unidos, no significa que este bien deba producirse en el país en cuestión. Podría producirse en el extranjero, en un sitio que representara bajos costos, y después exportarse nuevamente a Estados Unidos. La teoría del ciclo de vida del producto claramente explica la migración de industrias maduras, alguna vez establecidas en Estados Unidos, hacia sitios de ensamblaje de bajo costo. Ventaja competitiva de una nación: El diamante de Porter
En 1990, Michael Porter, de la Escuela de Negocios de
Harvard publicó los resultados de un trabajo de investigación, cuyo objetivo era determinar el motivo por el que ciertas naciones tienen éxitos y otras fallan en la competencia internacional. El objeto de estudio de Porter y su equipo abarcó 100 industrias en 10 naciones diferentes. El libro que contiene el resultado de este trabajo, The Competitive Advantage of Nations, ha hecho una importante contribución a la teoría del comercio. La tesis de Porter sostiene que existen cuatro atributos principales de una nación que moldean el contexto en el que las empresas locales compiten, y estos atributos promueven o impiden la creación de una ventaja competitiva.
Estos atributos son:
1.Dotación de factores. La posición nacional en los factores de producción como la mano de obra calificada o la infraestructura necesaria para competir en una industria determinada.
2.Condiciones de la demanda: La naturaleza de la demanda nacional
para el producto o el servicio de una industria determinada.
3.Industrias conexas e industrias de apoyo: La presencia o ausencia
dentro de una nación de industrias proveedoras y conexas que sean internacionalmente competitivas.
4.Estrategia, estructura y rivalidad de las firmas: Las condiciones en una
nación que rigen la forma en que las compañías se encuentran creadas, organizadas y dirigidas, así como la naturaleza de la rivalidad nacional. Si bien Porter no propone algo radicalmente nuevo, ciertamente analiza las características de los factores de producción en detalle. Por una parte, reconoce las jerarquías entre los factores, y hace una distinción entre los factores básicos (es decir, los recursos naturales, el clima,la ubicación y la demografía) y los factores avanzados ( es decir, la infraestructura de comunicaciones, la mano de obra refinada y calificada, los recursos de investigación y los conocimientos tecnológicos). Porter sostiene que los factores avanzados son los mas significativos para la ventaja competitiva. A diferencia de los factores básicos (una dotación natural), los factores avanzados son el producto de la inversión hecha por los individuos, las compañías y los gobiernos. Condiciones de demanda
Las firmas, por lo general, son mas sensibles a las
necesidades de sus clientes mas cercanos.
Porter sostiene que las empresas de una nación
adquieren ventaja competitiva si sus clientes nacionales son refinados y demandantes, ya que tienden a presionar a las empresas locales para que cumplan con altos estándares de calidad y para que les ofrezcan nuevos productos. Industrias conexas e Industrias de apoyo
El tercer atributo general de la ventaja nacional en una
industria es la presencia de proveedores o industrias conexas internacionalmente competitivas.
Una consecución de esto es que las industrias
exitosas dentro de un país tienden a agruparse en ensambles de industrias conexas. El sector textil en Alemania es ejemplo de un ensamble de industrias que incluye la del algodón, la de la lana, la de las fibras sintéticas, la de agujas para máquinas de coser y la de una amplia variedad de maquinaria textil, y todas ellas producen artículos de alta calidad. Estrategia, Estructura y Rivalidad de las empresas
El cuarto atributo general de la ventaja competitiva en
el modelo de Porter está constituido por la estrategia, la estructura y la rivalidad de las empresas dentro de una nación. Porter establece dos puntos importantes aquí. El primer punto , perfeccionamiento de los procesos de fabricación y de diseño de producto. El segundo punto de Porter consiste en que existe una fuerte asociación entre la competencia nacional y la creación y persistencia de la ventaja competitiva en una industria. La enérgica rivalidad nacional induce a las empresas a buscar maneras de mejorar la eficiencia, lo que las convierte en mejores competidores internacionales. La competencia entre las empresas de una misma nación crea presiones para innovar, mejorar la calidad, reducir los costos e invertir en el mejoramiento de los factores avanzados.